¿Cómo se puede encontrar? Antes de comprar cualquier sillín recomendado por un vendedor en una tienda de ciclismo, debes de tener en cuenta que para saber cuál es el mejor para tí, necesitas hacer una serie de pruebas físicas para saber la talla correcta, por lo que visitar a un bikefitter sería lo ideal.
La longitud y forma del sillín
La longitud de un sillín, al contrario que lo ancho, no es una medida a tener en cuenta a la hora de elegirlo. Sin embargo dependiendo de la modalidad de ciclismo que practiques (carretera, montaña, triatlón) necesitas tener mayor o menor movilidad hacia delante o hacia detrás para tener la posición más cómoda.
La forma de tu sillín idóneo depende de tu sexo. Normalmente, las mujeres se sienten más cómodas sobre un sillín más ancho, específico para su anatomía.
A tener en cuenta tu flexibilidad y tu posición sobre la bicicleta
Las personas poco flexibles tienen tendencia a moverse mucho sobre el sillín. Para ellos funciona mejor un sillín más redondeado. Un ciclista flexible tiene una posición más estable sobre la bicicleta y tiende a sentarse más cómodamente en un sillín plano. Mientras que un ciclista muy flexible se beneficiará más de un sillín ligeramente curvado.
Ancho de tus isquiones
Los sillines se presentan en distintos anchos, que dependerá de la distancia entre tus isquiones (huesos en tus glúteos). Tomando esta medida, podrás descubrir exactamente el sillín más idóneo. Es muy fácil medir la distancia entre tus huesitos con las herramientas necesarias que encontrarás con un bikefitter.
Posición del sillín
Necesita estar horizontal. Si la punta del sillín apunta demasiado hacia arriba o hacia abajo, podrías tener incomodidad en tu entrepierna. Si el asiento está demasiado inclinado hacia delante o atrás, podría derivar en problemas con tu cuello, la parte baja de la espalda o los brazos.